Me levanté de la cama para coger mis braguitas que estaban en el suelo. Acababa de decirte "te quiero...". No sabía como decirtelo y esperaba el mejor momento con ansia. No estaba ilusionada por decírtelo, sabía que iba a ser un error, pero era lo que sentía.
No obtuve respuesta. Ni a día de hoy, tampoco. La incertidumbre y el dolor me visitan todas las noches al acostarme en la cama donde te vi por última vez. Sólo me visitan de noche, cuando prima el silencio y la luz propia de la noche quiere colarse por mi ventana.
4 comentarios:
Nunca es un error sentir .... no pienses eso, es lo que tiene eso de estar vivos, y lo que duele es que ese sentimiento no sea correspondido como y cuando nosotros esperamos ... Quizá necesite su tiempo para responder .... Piensa que es para bien aunque no se adapte a lo que, como ya he dicho antes, nosotros esperamos ... Seguramente, habrás aprendido algo ... pero no te encierres!!! Un besazo ... Kuki
Siempre se aprende algo ;)
Me ocurrió exactamente lo mismo... salvo que no tuve que recoger las braguitas, jejejeje. De error a error y tiro porque me toca. Historia triste pero bonita entrada, no dejes de escribir.
Sabes que tengo poco tiempo, pero tengo varias en la mente...
Publicar un comentario