Había aparcado, ya estaba andando, camino del trabajo. Con prisas, como siempre, con miles de folios encima y justa de tiempo. Cruzo el semáforo y se me cae una de las carpetas. Me agacho a recogerla y al levantarme... ¿Eras tú?...
¿O no?
Se me cerraba el semáforo, tenía que cruzar.
Ya no sé si eras tú o no.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario